Mujeres comprometidas

Descripción

Uno de los más grandes compromisos de liderazgo usados por Dios es Débora; esta mujer tenía la responsabilidad de dirigir un pueblo, pero no cualquier pueblo: el pueblo de Dios. Era una mujer que tenía tanta autoridad que hasta los soldados de altos rangos querían estar al lado de ella para sentirse protegidos. Su liderazgo no era de imposición, sino de influencia, un liderazgo que desafiaba a otros. ¿Cómo estás formando a las personas que Dios te ha confiado? Porque tal vez no tengas una célula o un grupo de oración, pero si eres madre, esposa o vives con tus padres: tienes que ejercer un liderazgo de desafío en ese lugar. Si haz sentido que tu liderazgo no es lo suficientemente bueno

1. Preferir la inspiración que la imposición. No puedes obligar a la gente a que te siga: tu testimonio debe ser atrayente a otras personas. Mujeres casadas, deben estar sujetas a su marido: la sujeción es una actitud de humildad donde te entregas totalmente a tu esposo por amor. Debes dar ejemplo en tu forma de hablar, también en el estudio de la Palabra de Dios. No compita con su esposo: si la mujer ejerce un liderazgo mayor al del hombre o viceversa, no puede competir con eso porque es incorrecto y daña las relaciones.

2. Elija la formación y rechace la postración. La Palabra dice (en Lucas 2:52) que Jesús crecía en carácter, sabiduría y gracia para con los hombres: mujer, tu también debes recibir esta misma instrucción. Usted necesita apartar tiempos para estudiar: no dedique tiempo a cosas innecesarias como la televisión, cada día preocúpese por formarse mejor. Lea la Biblia primeramente, pero también lea libros que edifiquen el área profesional en la cual usted se desempeña. Júntese con personas correctas, no con gente chismosa o de vanas palabras. Pregúntele a la gente de su alrededor que cosas debes cambiar; pregúntele a su esposo, a sus hijos, a sus discípulos.

3. Elija desafíos en vez de la comodidad. La mediocridad es fácil; basta con no hacer nada o con hacer las cosas a medias y tienes un mediocre. Pero una persona de desafíos cada día se esfuerza por alcanzar sus metas. Cada día levántate, sal de la comodidad y afronta nuevos desafíos y vas a ver como empiezas a ver la presencia de Dios. Si tu eres una madre que se dedica a los quehaceres de la casa, hazlo con excelencia; que cuando tu esposo llegue, se sorprenda de ver la casa mejor de lo que siempre está. Mujer, que todo lo que hagas sea por amor: por amor a Dios, a tus hijos, a tu esposo; si te dejas influir por el temor vas a tener en tu vida inseguridad, fracaso y mediocridad. Deja una huella por todo lo positivo que hagas para Dios.

TITULOS CONTENIDOS EN ESTA SERIE:

1. ¿Mujer quién eres tú? – Profeta Norma Stella Ruiz
2. El verdadero liderazgo de la mujer – Profeta Norma Stella Ruiz

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